Si contrajeras el compromiso de cumplir la última voluntad de una persona y tal voluntad fuera contraria a la voluntad de toda la comunidad en donde vives, ¿la cumplirías?
La Hojarasca de Gabriel García Márquez es una novela que se desarrolla en el mismísimo Macondo de principios del siglo XX.
En este relato no ocurre la fiebre de prodigios del Macondo de Cien años de soledad, pero tiene un estilo poético que hace de su lectura una experiencia de gran emotivdad. Te doy una probadita:
"El calor es sofocante en la pieza cerrada; se oye el zumbido del sol por las calles, pero nada más. El aire es estancado, concreto; se tiene la impresión de que podría torcérsele como una lámina de acero."
Esto bien podría haberse escrito en renglones cortos ¿no te parece?
La estructura de la novela es muy interesante, está relatada en primera persona pero dandole la palabra a cada uno de los personajes excepto a aquel que crea el conflicto, personaje que por cierto me recuerda a Meursault, el personaje de El Extranjero de Albert Camus. Que yo sepa, García Márquez no era existencialista pero tal vez en esta novela quiso explorar esa filosofía.
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