Es posible que en estos momentos el problema que más preocupe a la mayoría de los mexicanos sea el de la seguridad por encima del de la economía. Eso hace dificil de entender el por qué los candidatos de oposición no aprovecharon este tema en sus campañas de proselitismo, incluso Javier Sicilia les espetó el que no se ocuparan de las víctimas de la guerrita de Calderón.
La explicación está en la mercadotecnia, en la experiencia y en el uso electoral que Calderón ha dado a las instituciones de seguridad.
Cada vez que en tiempos electorales alguien intentó abordar el tema la represalia de Calderón era acusar a los candidatos o a sus correligionarios de vínculos con el narcotráfico, así sucedió en las elecciones intermedias con el Michoacanazo y en estas con la aprehensión del General Ángeles.
Puestas así las cosas los candidatos de oposición prefirieron no desgastarse en ese frente.
La experiencia de la izquierda en materia electoral en realidad data de las elecciones de 1988: la instauración de las doctrinas neoliberales trajeron despidos, desplome del poder adquisitivo, y se empezó a desmantelar el sistema de protección institucional a sectores productivos como la agricultura, por lo que cundió un gran descontento que se encauzó hacia la candidatura de Cuauhtémoc Cárdenas.
En 1994 y en 2000 la izquierda se empecinó en señalar los aspectos negativos del régimen dando a su campaña un tono tan oscuro que sus votantes la fueron abandonando.
En 2006 López Obrador construyó su candidatura presentándose como el polo opuesto a la frivolidad de Fox. Debido a que ese sexenio resultó una decepción la candidatura de López Obrador fue muy exitosa.
En 2012 la izquierda ya aprendió que una campaña electoral es una campaña publicitaria , donde la mercadotecnia impone sus reglas, una de las cuales es que hay una mayoría dispuesta a elegir una opción positiva, de esperanza que una opción que nos muestre un panorama desolador aun cuando coincida con la realidad, mejor dicho, si coincide con la realidad es todavía más repulsiva pues embarra en la cara del posible votante asuntos que lo tienen tan agobiado que prefiere mirar a otro lado. Y es por todo esto que las campañas de la oposición tuvieron una tónica tan anticlimática con el momento actual del país.
3 comentarios:
"la izquierda ya aprendió que una campaña electoral es una campaña publicitaria "
24 años en darse cuenta?! Chale
"si coincide con la realidad es todavía más repulsiva "
Y que, mentimos? vendemos mentiras?
Francamente, esto de la democracia es mierda porque es, al final del dia, un concurso de popularidad. Ahi tienes al EPN, el candidato de la television.
Hay lecciones difíciles de aprender, por ejemplo: hay personas que aun no han aprendido que es mejor que vayan a votar.
O quizas hay personas que no han aprendido que no importa si tenemos democracia, si nos dan a elegir la misma mierda de siempre.
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