Hace días decía yo aquí que a México nunca le salían bien las cosas , mi intención era exponer algunos ejemplos de la Historia Naconal en los que las oportunidades para hacer de la nuestra una próspera y justa nación se nos habían ido , pero revisar eso me deprimió tanto que lo he dejado por la paz. Sólo quiero mencionar que las dos guerras mundiales le dieron a México grandes ingresos por concepto de exportación de materias primas . Luego , en el sexenio de Miguel Alemán ,con el intento de industrialización del país hasta se habló de un Milagro mexicano , pero este proyecto sobrecalentó la economía , se disparó la inflación y se inició el proceso de las devaluaciones cíclicas de nuestra moneda.
El sexenio de Ruiz Cortines vino , mediante una rigurosa política de austeridad, a dar estabilidad a la economía , mas todo esto estaba apuntalado en un férreo control de los sectores obrero y campesino , que trajo como consecuencia las crisis políticas de los sesenta que culminaron con el movimiento estudiantil-popular de 1968.

El impacto que este movimiento dejó en el país fué tal que determinó la política populista de Luis Echeverría , que acabó por endeudar al país y dejó al estado a cargo de una infinidad de empresas que en su mayoría eran elefantes blancos. En el sexenio de López portillo la oportunidad que brindó el hallazgo de los nuevos yacimientos petroleros se fue a la chingada por la actitud de nuevos ricos .

Y resulta que en nuestros días , estamos temerosos de adoptar las políticas que en paises como Corea y China dan resultado . Tal temor es producto de el fracaso en la privatización de las carreteras, pues a final de cuentas se tuvo que rescatar a los consecionarios de ellas con nuestro dinero ; y la privatización de los bancos , que también tuvieron que ser rescatados , para luego venderlos a inversionistas extranjeros (especialmente españoles), y seguir pagando los intereses de tal rescate. Por eso es que hay tantos sectores que se oponen a que se admitan inversiones foráneas en la industria eléctrica y petrolera , porque así nos ha ido con esas medidas.

En esas estaba cuando al leer el artículo que los lunes, Luis González de Alba publica en Milenio Diario , me encuentro con otra oportunidad que México no podrá aprovechar:

...nuestro turismo crece. Es verdad lo último . Pero el crecimiento que ha tenido el turismo mexicano se debe a que el Mediterráneo se ha encarecido de manera escandalosa. España primero, y ahora Grecia se han vuelto caros con el Euro y los turistas buscan mejores opciones. Las quejas en tiendas , restoranes, y hoteles son constantes: Ya era junio y los hoteles de Poros están vacíos , dijeron unos camaristas en el autobús. Luego hubo dos buenas semanas, las últimas de agosto, y para de contar . Con mar limpio al que se le ve el fondo a varios metros , con vinos locales excelentes, con infraestructura hotelera , a Grecia se le va el turismo . La oportunidad es de México , que tiene mejores playas, aunque no mejores aguas . Pero nos ocurrirá como los del TLC . Perdimos diez años de ventaja. Ahora ya lo tiene Centroamérica. Nosotros seguiremos discutiendo , bueno ... nuestros diputados , si fue un acierto el tratado que nos hizo venderle a Estados Unidos más de lo que le compramos, una balanza comercial favorable.
Ante la crisis turística , la televisión griega tiene un anuncio oficial que se dirije a quienes tienen trato directo con el turista: Una sonrisa , pide. Lo demás ya lo tienen de sobra. Pero , como en todos los paises que se vuelven ricos, el problema es que el mesero ya casi nunca es griego . En las tres tabernas cercanas , sólo una tiene griegos .En las otras dos hay polacos y rumanos , en una , georgianos en otra. Son muchachos que trabajan sólo por el verano. Nunca serían competencia para nuestros bien entrenados meseros. Los hoteles tampoco son comparables ni los servicios en la playa.

Pero dejaremos ir la oportunidad, como dejamos ir la del TLC. Si no que chiste, como dice una amiga. Una joven conocida me pidió referencias para su viaje a México . Para empezar, ya tenía decidido no ir a la Ciudad de México por su mala fama. Dos asuntos le preocupaban : la violencia y la comida. Como no iba al D.F. , la violencia no la detenía ; pero quiso saber si , "como en Egipto", no se pueden comer las verduras crudas. Le dije que no se preocupara... me arrepentí de mi mentira: yo no como verduras crudas en México. Sobre el agua sí la previne : nunca la de la llave. No sabía , la pobre , que otra agua aún más sucia la esperaba , la del mar. No la asaltaron ni se enfermó...pero la cogió el ciclón anterior y se quedó sin vuelos al caribe. Le avisé a su padre que la enviaría a Vallarta "ahora el Pacífico está pacífico", le dije. Fué y volvió muy contenta.