
En junio de 1938 Virginia Woolf publicó Tres guineas, sus reflexiones valientes e importunas sobre las raíces de la guerra. Escrito durante los dos años precedentes, cuando ella y casi todos sus amigos íntimos y colegas estaban absortos en el avance de la insurrección fascista en España, el libro se encuadró como una muy tardía respuesta a la carta de un eminente abogado de Londres que le había preguntado "¿Cómo hemos de evitar la guerra en su opinión?". Woolf comienza advirtiendo con aspereza que acaso un diálogo verdadero entre ellos sea imposible. Pues si bien pertenecen a la misma clase, "la clase instruida", una amplia brecha los separa: el abogado es hombre y ella mujer. Los hombres emprenden la guerra. A los hombres (a la mayoría) les gusta la guerra, pues para ellos hay "en la lucha alguna gloria, una necesidad, una satisfacción" que las mujeres (la mayoría) no siente ni disfruta. ¿Qué sabe una mujer instruida -léase privilegiada, acomodada- de la guerra? Cuando ella rehuye su encanto ¿sus actitudes son acaso iguales?
(Susan Sontage; Ante el dolor de los demás)
Y sin embargo , a través de la Historia, las mujeres no sólo han sufrido los efectos de la guerra , sino que también han tenido que pelearlas , en México , durante la revolución las soldaderas empuñaron las armas ; poco tiempo después de escribirse el texto que cita Susan Sontage, las mujeres soviéticas fueron incorporadas al ejército rojo, actualmente en muchos países las mujeres forman parte de las fuerzas armadas.Y por otra parte , sí resulta dificil encontrar en la Historia , mujeres que hayan emprendido una guerra , talvez Margaret Tatcher sea una de ellas , pero ¿quién más?
1 comentario:
No mames, se le marca el pezón a Demi Moore!!!
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