Quienes tenemos el hábito de mantenernos al tanto de lo que acontece en el país estábamos enterados , desde hace más de un año, de que en la legislación no había una pena al delito de desacato que supuestamente había cometido Andrés Manuel López Obrador. Periodistas como Don Miguel Angel Granados Chapa se encargaron de darlo a conocer , así como también el hecho de que la misma Procuraduria General de la Nación se había desistido en casos similares por el hecho de que al haber dos penalidades en la legislación se excluyen y queda sin materia cualquier proceso que se inicie para tal efecto

Es decir que la Procuraduría no conoció apenas ayer la indeterminación jurídica que existe al respecto , y que sabía desde el principio que todo el argüende que se armó para sacar a López Obrador de la Jefatura de Gobierno del D.F. no tenía un respaldo sólido , que perderían el caso.

¿Entonces por qué echarlo andar y continuarlo hasta el desafuero de López Obrador? Ahora queda más claro que nunca que la intención era sacarlo de la contienda por la presidencia , pues no había materia legal alguna para , como el gobierno federal aseguró, "aplicar la ley sin reservas"