.

.

¿Qué se va a acabar primero?

miércoles, 13 de marzo de 2019

Charlas de café con Porfirio Díaz. Guadalupe Loaeza

En 2010, a raiz del Bicentenario de la Independencia y del Centenario de la Revolución, el periódico La Jornada lanzó una colección de libritos llamada "Charlas de café con...". En esta colección se invitó a diferentes escritores e historiadores para que escribieran sobre un encuentro ficticio con los personajes históricos que protagonizaron esas dos transformaciones (como le gusta decir al Presidente) del país, en el que se intentaba mostrar el lado humano de los personajes.

De esa colección solamente he leído dos charlas. La que escribió la historiadora Patricia Galeana sobre Miguel Hidalgo y la que escribió Guadalupe Loaeza sobre Porfirio Díaz. La maestra Galeana no quiso escribir su charla con café porque dice que Hidalgo era más bien adicto al chocolate. En fin, como el encuentro es ficticio los autores podían escribir lo que quisieran, pero en cuanto a los hechos históricos sí debían apegarse a lo que hasta el momento se conoce según las fuentes históricas.

Guadalupe Loaeza fue a buscar a Porfirio Díaz hasta París, al cementerio de Montparnasse,como no logró entrevistar allí a Díaz fue a buscarlo en los distintos lugares que frecuentaba hasta que logró encontrarlo en el balneario de Biarritz, donde solía ir Don Porfirio con su familia.

En materia histórica Loaeza empieza por dar cuenta de todo lo negativo del personaje histórico; la pobreza y el hambre en que mantenía a la población, la represión a toda disidencia, el genocidio del pueblo yaqui, el aplastamiento de los movimientos obreros en Río Blanco y Cananea, las mentiras en la entrevista con el periodista Creelman, etc.

Pero Díaz no fue solamente dictador. Igancio Zaragoza duró muy poco al mando de la resistencia contra la invasión francesa. Lo más pesado de la lucha recayó en hombres como Porfirio Díaz cuya destacada actuación y una vez expulsados los franceses, lo puso en posición de disputar la Presidencia de México, pero enfrente tenía a Benito Juárez y ni modo, este paisano de Díaz era muy fregón para la política y mientras vivió, a Don Porfirio nomás no se le hizo.

Es muy interesante la parte en la que Loaeza aborda la relación entre estos dos personajes, de amigos y correligionarios pasaron a adversarios, y cuando Díaz llegó al poder realizó muchos homenajes a Don Benito, por ejemplo, ¿sabías que el Hemiciclo a Juárez de la Alameda central fué inaugurado por Díaz?

La última parte del libro trata del lado más humano de Díaz, de sus orígenes, de su familia, su madre, sus hermanos, de las mujeres en su vida (fue muy enamorado el general), de sus hijos, de sus yerno.

De esta última parte destaco dos hechos: la primera esposa de Díaz era su sobrina; "Don Porfiro tenía veinte años cuando veía a su sobrina jugar con sonaja de madera..." con la que tuvo siete hijos pero se le murieron cinco.

El otro hecho es que Loaeza relata el episodio aquel que dio origen a que en México se relacione el número 41 con la homosexualidad. Resulta que en una fiesta que hubo un dia, en la que no fue invitada ninguna mujer porque la mitad de los caballeros se vistieron de féminas, terminó con la irrupción de la policía y todos los fiesteros terminaron en la cárcel.
Desde muy arriba se dio la orden de desaparecer los partes policiacos y todo lo referente al caso, se dice que los detenidos fueron 42, pero oficialmente se dijo que fueron 41 (así dice Loaeza, aunque yo sabía que eran 41 y oficialmente se dijo 40), el caso es que el detenido que faltaba y por el que se hizo el despliegue de ocultación desde el Poder era nada menos que Don Ignacio de la Torre, esposo de Amada Díaz, hija de Porfirio Díaz. Por cierto, patrón del entonces caballerango Emiliano Zapata, el mismo que ya de General revolucionario encarceló a De la Torre por hacerse pasar por general zapatista para traficar ilegalmente con maíz.

¿Recomiendo este librito? Pues sí, es muy recomendable, también el de Hidalgo y supongo que el resto de la colección.

2 comentarios:

Tzuky dijo...

¿Donde puedo conseguir este libro?

Indio Cacama dijo...

Lo editó La Jornada, por lo que seguramente allí puedes preguntar

Temas afines que se han publicado en este blog:

Related Posts with Thumbnails