Debido a la fama que adquirieron los niños triquis basquetbolistas, Peña les construyó una cancha para que entrenaran, toda la inversión fue federal; pero por alguna razón el Gobierno creyó conveniente que la cancha estuviera dentro de una escuela. En la población donde viven los niños triquis la CNTE está muy fuerte y siempre están en paro, por eso el Gobierno decidió poner la cancha en otro pueblo en donde el Presidente Municipal (que no puso un peso para construir la canccha), les cobra por usarla y de paso los discrimina por ser triquis.
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