"-Entonces, ¿por qué está tan dolorida mi alma?
-¡Porque te es grato!
(...)
-¡Estáis seguro de eso?
Miróme a los ojos, y sin apresurarse, me fue hablando como si hincase clavos en mi pecho.
-¡Si sois sincero, habréis de confesar que el sufrimiento de vuestra alma os es indispensable! Eso os sitúa por encima de los demás, y tratáis de conservarlo preciosamente, como si fuese una distinción ¿verdad?"
Máximo Gorki. "Mis Confesiones".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario