Desde el Gobierno de Díaz Ordaz fue que el Gobierno de Estados Unidos empezó a presionar a México para perseseguir a los narcotraficantes. Desde ese período hasta el de Zedillo, el régimen priista solamente administraba la presión gringa, dejaba pasar la droga y de vez en cuando agarraba a uno que otro capo.
El combate del narcotráfico en Colombia cambió la (llamésmola así) narco geopolítica en la región y México dejó de ser corredor de la droga que se producía en Sudamérica y pasó a ser productor.
Fox desmanteló la infraestructura de inteligencia del CISEN y en una demencial polítca de que cada entidad se las arreglara como púdiera en aras del Nuevo Federalismo, entregó regiones enteras al crimen organizado.
Calderón respondió al problema como responde cualquier alcohólico; con bravuconadas, pateó el avispero y la situación empeoró: a cada golpe a los carteles, éstos se fragmentaban y se hacían más peligrosos; si ya no podían seguir con el negocio de la droga se pasaban a los negocios del secuestro, la extorsión y la trata de personas.
Peña ha seguido la misma estrategia de Calderón y el resultado ha sido el mismo. a cada golpe a los carteles surgen otros más violentos o como en Jalisco, con más poderío logístico, económico y de armamento. Ahora que el Gobierno de Peña lance toda la furza del Estado contra el cártel de Jalisco ¿cuál será el nuevo cartel y cual Estado será su sede?
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