En dias pasados la Secretaría de Marina, siguiendo las conclusiones de un informe de inteligencia llevó a cabo un operativo donde, según la Marina, incautó un montón de kilos del poderoso explosivo conocido como C-4; además, dijo la Marina, que aprehendió a cuatro personas involucradas.
Después se supó que los indiciados ni siquiera llegaron a pisar los separos, que los infantes de Marina los sacaron de sus habitaciones sin orden de aprehensión, que los interrogaron sin la presencia de un abogado, que registraron sus habitaciones sin orden de cateo y que les incautaron temporalmente petenencias como identificaciones y teléfonos celulares; todas estas violaciones a los derechos humanos fueron pasadas por alto por los medios, por los legisladores, para acabar pronto , por toda la opinión pública; ¿cuántos operativos llevan a cabo la Procuraduría, el Ejército y la Marina sin plena observancia de los derechos humanos y la opinión pública permanece callada?
A final de cuentas la Procuraduría desmintió a la Secretaría de Marina al decir que lo incautado no era C-4 sino parafina. El problema aquí es que la Procuraduría es un organismo infiltrado por el crimen organizado y tan ineficaz, que por eso es que Calderón hecho mano del Éjército y luego de la Marina; y posiblemente por eso la Procu dice que el C-4 es parafina, para hacer ver a la Marina , no sólo como violadora de los Derechos Humanos, sino como ineficaz.
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