No aceptar la liquidación más pilón que el gobierno ofrece a los electricistas es una forma digna y heroica de manifestar la inconformidad por la liquidación de Luz y Fuerza y además tiene efectos legales pues mientras el 50% más uno de los electricistas se sostenga en la posición de no cobrar el Sindicato Mexicano de Electricistas tiene existencia legal, es decir , es una especie de votación.
Pero como dijo el maestro Granados Chapa el heroísmo se entrega no se exige, nadie, ni la dirigencia sindical , ni los que apoyamos la causa de los electricistas puede exigir a los compañeros que no vayan por su liquidación y obtengan dinero para sostener a sus familias ahora que la crisis golpea más severamente a la población y peor si como los compañeros electricistas se quedan sin trabajo ahora sí que de la noche a la mañana.
Por una parte entiendo bien el dilema de los compañeros que ya cobraron, pero la verdad es que en el fondo me gustaría que los que ya cobraron y que en la jerga sindical se les conoce como "esquiroles de barandilla", sean aquellos empleados de los que tanto se queja la gente , de los déspotas cajeros y de los que cobraban por los diablitos y me gustaría que fueran estos a los que la Comisión Federal de Electricidad acogiera en la prometida recontratación para que se queden con la basura de Luz y Fuerza.
3 comentarios:
Los que ya cobraron saben que pueden ser recontratados, algunos pasaran los exámenes de aptitud. Los que no han cobrado están perfectamente seguros que su único amparo y cobijo (léase marmaja) viene del sindicato que no del trabajo
Al menos eso percibo por las caras de resentidos de los manifestantes frente al tribunal
Yo percibo conciencia de clase. De todos modos tanto tú como yo incurrimos en subjetividad.
¿"Caras de resentidos"? Sin duda, eso se llama subjetivismo, la disposición mental más lejana a lo que llamo ciencia. Y no es que el subjetivismo no sea válido, pero -como dato- carece de todo rigor y, ergo, fiabilidad.
Mas, como no soy asidua a ninguna clase de relativismo -relativismo subjetivista, en este caso- reconozco que más allá de nuestras propias percepciones existe una verdad objetiva en torno a los electricistas, LyFC y el SME; en particular, creo que cualquiera que sea despedido de la noche a la mañana, lo menos que puede mostrar es desazón (no acepto el argumento de que se lo ganaron porque, siendo ese el caso, el gabinete y presidente espurios tendrían que ser los primeros en desaparecer ¿Después? la caterva de tecnócratas inútiles que han venido a desmantelar al país con su ineptitud y a conquistar masas con su verborrea)
Habló, Eleutheria.
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