hace algunas semanas reflexionaba aquí sobre el recurso de negación del que tan frecuentemente hace uso Calderón y su gabinete.
Para ser justos no son los únicos políticos que así proceden; Sergio Aguayo señaló que la izquierda mexicana ha estado pasando por alto una y otra vez acciones de Fidel Castro que favorecen a los enemigos de la izquierda mexicana, por ejemplo la amistad que Castro tuvo con Fernando gutierrez Barrios, represo de la izquierda desde su posición como jefe de la Dirección Federal de Seguridad; otro ejemplo fue la legitimación del fraude con el que Salinas de Gortari usurpó la presidencia y lo que ha quedado evidenciado con el libro de Ahumada, que fue Castro quien ofreció la Isla de Cuba a Salinas de Gortari como base de operaciones para el Compló.
Tarde o temprano la izquierda mexicana tendrá que enfrentarse a la labor de revisar la relación con Castro; o qué ¿por siempre será solidaridad de aquí para allá y palo de allá para acá?
Otra entidad que tendrá que reconsiderar su sistema de lealtades es el votante de izquierda: Al parecer, si tomamos en cuenta las encuestas, ya lo está haciendo, pues en vista del desastre en que se ha convertido la principal fuerza electoral de izquierda, esta vez no logrará recaudar un votación considerable; ni modo, ya basta de voltear hacia otro lado ante la corrupción, corporativismo, clientelismo y antidemocracia perredista.
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