Los extremos

Cuando Menotti se hizo cargo de la Selección mexicana de futbol se dió cuenta de que el tipo físico mexicano estaba en desventaja con la mayoría de los futbolistas europeos y , si se quería lograr algo importante era preciso diseñar una estrategia para compensar las desventajas. Entonces puso a jugar a los mexicanos a lo que en el argot futbolístico se conoce como "achique" o "pressing" , que consiste en adelantar todas las líneas hacia el area contraria para hacer caer al advessario en fuera de lugar, de esta manera la selección mexicana pudo hacer papeles decorosos ante gigantes como Alemania.

Con lo anterior intento ejemplificar el hecho de que es posible enfrentarse a un adversario más fuerte si se cuenta con una estrategia adecuada. En el presente año vimos ( y algunos participamos), el enfrentamiento de un sector de la población , débil en recursos económicos , pero con una buena estrategia y además (digo yo), con la razón de su parte , ante un adeversario fuerte en recursos económicos como es el gobierno de Calderón. Ambos contendientes disputaron el favor de la opinión pública y a pesar de que Calderón uso todos los medios y bombardeó con mensajes sobre su iniciativa de reforma energética , encuesta tras encuesta, sondeo tras sondeo , la percepción generalizada era que Calderón pretendía privatizar a PEMEX y que los principales beneficiarios serían los familiares de su Secretario de Gobernación . Los débiles impusieron sus puntos de vista en amplios sectores , lo que motivó, ante la cercanía de las elecciones legislativas, el retiro del apoyo priista a las iniciativas de Calderón y dió paso a las propuestas de el Frente Amplio Progresista.

Hasta aquí se podría decir que el Movimiento Nacional en Defensa del Petroleo logró su cometido: impedir la privatización de PEMEX . Pero López Obrador suele vender caras las victorias y en vez de Aceptar lo hasta ahora logrado, vigilar que se cumplan los compromisos y seguir luchando para evitar cualquier retroceso que signifique violar la Constitución, privatizar o que continúe la corrupción en Pemex, se ha enredado otra vez ( la anterior fue con la Reforma Electoral), en una serie de malabares para hacer parecer derrota lo que evidentemente es una victoria , tal vez con el afán de no dejarse arrebatar banderas , que no es el caso , pero en fin , ahora sí le deja el paso a Calderón para que haga caravana con sombrero ajeno y se cuelgue de lo aprobado por el Senado.

Y curiosamente Andrés Manuel coincide con los fanáticos neoliberales en su repudio a la reforma petrolera votada , como cincidió con los medios televisivos en su repudio a la reforma electoral. Los extremos se tocan.