Para que Claudia Sheimbaum entreue la Presidencia faltan

.

lunes, 21 de enero de 2008

Fotografía tomada hace algunos años


Primero los de la derecha: El de traje, mi hermano Héctor; la de gris mi esposa Fabiola. Ahora los de la izquierda: La de coral, mi cuñada Elvia; el de chamarra color vino , el tal Ernesto.
Y al centro mi hoy finado padre, Ernesto.

4 comentarios:

Manuel dijo...

¿Cuál es el secreto para ser inmortal? ¿O para perdurar? Tener quien o que nos trascienda, alguien que nos recuerde y llore, o nos admire y sonría lleno de orgullo en lo grande de nuestro ser.
¿Quién dice que no somos inmortales? Si nuestro recuerdo perdura y se conmemora en otro para llevar nuestro ejemplo a otro tiempo y espacio, permitiéndote admirar y recordar a quien sin haber conocido sabes que nos dejó algo que trasciende y nos acompaña (Si eso no es ser Dios o estar con Él, es algo muy cercano).
Ernesto, un abrazo muy fuerte y que la resignación al llegar nos permita admirar e imitar a tu padre en todo lo bueno
Qué bonito recuerdo, una foto en que no hay rostros adustos, solo sonrisas que recordar.

Indio Cacama dijo...

Gracias Manuel, si alguien tiene méritos para ser inmortal ese es mi viejo, sin duda.

carlos dijo...

hay tres personas (dos en especial, pues) en esa foto que tienen una cara de buenas personas que no pueden aguantársela. y mira que esa es una buena herencia.

y si, como dice manuel: las semillas (los recuerdos entre ellas).

Indio Cacama dijo...

Gracias Carlos.

Temas afines que se han publicado en este blog:

Related Posts with Thumbnails