Crisis neurótica por homosexualidad reprimida. ¡Pamplinas! El médico faltaba al rigor científico al atribuir, a priori, a asuntos psicológicos lo que con una auscultación bien hecha sería evidente que se trataba de una auténtica transmutación de género, y él sabía bien el origen del fenómeno.

Cómo no iba a saber que el flujo menstrual que lo sorpreendió no eran hemorroides , sino el resultado de haber estado ingiriendo las pócimas preparadas por él mismo; químico jarocho, émulo del Dr.Jeykil ,con diversas enzimas tendientes a...
bueno ya no recordaba todos los proyectos que había iniciado pero el último fue para poder beber alcohol de manera ilimitada sin emborracharse. Seguramente los residuos que su cuerpo no eliminó interactuaron con todos los residuos de todos los proyectos a que se autosometió como conejillo de Indias, en bien de la Ciencia.
Ya no había remedio, el proceso es irreversible , a menos que...
Sí, tal vez, si lograba sintetizar una nueva enzima
Pero no , ya no había tiempo , los enfermeros que habrían de llevar a Jorge Cuesta , el olvidado por tantos antologistas del grupo de Los Contemporaneos, al hospital pisquiátrico donde dias despues habría de suicidarse, ya habían llegado.
Ya no había tiempo para sintetizar una nueva enzima , pero tal vez sí para un poema , y el químico -poeta de un plumazo escribió las 37 estrofas del poema llamado

Canto a un Dios mineral