El video presentado ayer por Carmen Aristegui , en el que se hace evidente la manera como el gobierno priista de Tabasco presiona a un sector de la sociedad para colaborar con la campaña del PRI, es tan contundente (como suelen serlo las imágenes), que el funcionario balconeado fue cesado sin mayor preámbulo.
El manejo partidista de este video seguramente modificará las preferencias electorales en los comicios de Tabasco , pero no debemos engañarnos con la ingenua pretensión de que los malos , los mapaches , los manipuladores están todos en un sólo lado del espectro político , lo que se ve en el video vale para todas las fuerzas políticas actuantes el día de hoy , así se hace la política en México , con la misma vulgaridad que se aprecia en el video es que se manejan todos los partidos políticos.

En el video se balconea al PRI , pero también el PRD tiene lo suyo , heredero de muchos de los organismos corporativos de control popular como las asociaciones de taxistas , de tianguistas, de vecinos , etc, en no pocas ocasiones se ha recurrido a la presión para obtener apoyo y recursos para mitines y campañas de los afiliados a tales organismos. El PAN desde la Presidencia desvió recursos para la campaña de Felipe Calderón , la bajada de cortina foxista en realidad es para rellenar los huecos que al presupuesto de diversas dependencias dejó tal desvio. Por ejemplo los huecos al presupuesto de la oficina ocupada por Gilberto Rincón Gallardo , el Consejo Para Prevenir la Discriminación , que a pesar del exiguo presupuesto que tenía todavía le fueron escamoteados 12 millones de pesos para apoyar a Calderón , por cierto esa será la oficina que Patricia Mercado recibirá como premio a su labor de esquirol en las elecciones recientes.

El Partido Nueva alianza, fundado en la estructura corporativa del organismo que controla al magisterio en manos de Elba Esther Gordillo repartió el voto de sus controlados uno para lograr su registro y otro para Calderón (¿Por quien te vas por azul o por amarillo?)y lo demás pa'ver que sale. Es evidente que la subcultura antidemocrática priista se ha repartido a todo el espectro político y tendrá para rato.