Mesianismo es la doctrina o creencia que fundamenta sus principios en la futura llegada de un mesías caracterizado por sus condiciones salvadoras y liberadoras, que pondrá fin a un periodo connotado de forma negativa e inaugurará otro caracterizado por la bonanza y prosperidad.

El término “mesianismo” apareció en el siglo XIX, siendo empleado por primera vez en 1848 por el historiador francés Jules Michelet para definir la esperanza en una salvación o una liberación. Si bien los pensamientos mesiánicos pueden remontar sus orígenes a la aspiración bíblica de la liberación por el Mesías, en la actualidad, y
especialmente en ciencia política, el mesianismo designa el comportamiento volitivo de un individuo que, asumiendo un liderazgo aceptado y deseado por sus seguidores, se convierte en liberador de un pueblo o un Estado, al que rescata de una situación de opresión política. Es evidente la relación que existe entre el mesianismo y el retorno a un pasado mejor, en el cual se reconoce un bien superior.

Si bien su origen es religioso, el mesianismo ha trascendido su esencia inicial para adquirir un profundo sentido político.

Principalmente porque, al conceder al individuo la capacidad de transformar el mundo, ha estado asociado con frecuencia a la rebelión, considerada ésta como el paso necesario para erradicar la injusticia por parte de un líder carismático. Pese a ello, dimensión política y espiritual han convivido en las distintas revueltas mesiánicas sucedidas a lo largo de la historia; tal es el caso de las acontecidas
en Perú, Bolivia o México durante el periodo colonial.

México es una nación fundada por dos culturas mesiánicas , la indígena que reivindicaba la promesa que hizo Quetzalcoatl de volver a estas tierras y poner todo en orden , y la europea que basaba su espiritualidad en el cristianismo la doctrina mesiánica por excelencia.
Se produce la Conquista en México en buena parte por esa visión mesiánica que da al pueblo dominante, los mexica ,la idea de que la promesa de Quetzalcoatl se ha cumplido y la certeza a los pueblos oprimidos por los mexica de que ese es el momento de liberarse de tan sanguinario opresor.

La cultura mesiánica subyace entonces en una suerte de subconsciente nacional que se refuerza por las condiciones de miseria en que a lo largo de siglos ha vivido una gran parte de la población.
Para la clase dominante , para los beneficiarios del statu quo el mesianismo mediatiza la inconformidad social y le permite ganar tiempo para seguir disfrutando de sus privilegios ; es una suerte de pararrayos : en vez de que la inconformidad cunda se le entrega a los miserables la idea de que un día , cuando llegue el mesías las cosas van a cambiar , mientras hay que sufrir con resignación pues el
presente estado de cosas es pasajero.

La percepción colectiva de que hay una decadencia total en los valores éticos de la sociedad da la ilusión de que el advenimiento del mesías está por suceder.

El mesianismo significa, pues, la elevación de la conciencia total que puede ser consecuencia de un éxito grandioso o reacción contra el derrumbe externo, y en su fondo atestigua que un pueblo sometido no puede perecer, puesto que Dios lo predestinó a una misión, a una vocación sublime. Anton Knezevic, Münster, Westfalia
¿Tenemos los mexicanos esta visión ?¿Somos un pueblo predestinado? Reflexionemos en lo que la línea del Himno Nacional ha imbuído en la mente de generaciones de mexicanos a lo largo de más de un siglo:

Que en el cielo tu eterno destino por el dedo de Dios se
escribió

Los caudillos han hecho las veces de mesías en estas tierras y han dejado su marca en la política de todoslos niveles.
Una de las descalificaciones favoritas de los detractores de López Obrador ha sido la de colgarle un carácter mesiánico . Algo de razón tienen .Por ejemplo el lema de su gobierno en la Ciudad de México incluía la palabra esperanza que subliminalmente introduce esa condicion mesiánica de que todo va a cambiar. Pero para que esta noción prenda en una mayoría de la población tiene que haber algo que
se deba cambiar , tiene que haber en la percepción de la gente un deterioro tal que haga insoportable seguir así y sea necesario el surgimiento de un mesías.
Sobre el más reciente libro de Carmen Aristegui, Uno de dos, 2006. México en la encrucijada.La periodista dice:Lo de mesiánico es algo que juega bien en una campaña política para sus adversarios . Me parece excesivo colocar a alguien en esa tesitura , lo ubica en el terreno de fanatismo y no me parece que cuadre con el
personaje. Sin embargo, entiendo que por ese acercamiento a lo religioso le pueden asestar el calificativo de inmediato , pero mi opinión es que es desmedido y que no describe necesariamente al personaje. Sin embargo , sí me gusta la mezcla que él mismo hace de ese juarismo-cristiano, (...)Un sincretismo muy cercano a la idiosincracia mexicana.

Pero la verdad es que dificilmente se puede encontrar un político mexicano que no sea mesiánico. Digo, son mexicanos , surgieron de una cultura mesiánica ¿pueden no serlo aunque así lo deseen?
Felipe Calderón tiene fuertes compromisos con el Yunque , organización ultracatólica y ultramesiánica cuyo principal objetivo es fundar en México La Ciudad de Dios , en su discurso Calderón se cuida mucho de que no permee la fraseología católico-mesiánica hacia el exterior de su nucleo , pero no puede ser menos mesiánico que López Obrador