Se configura un modus operandi: El líder con mayor capacidad de convocatoria de la izquierda en México aparece en un acto multitudinario para hacer propuestas importantes para la vida del país y de pronto un grupo de provocadores se mete a Catedral o jitomatea a Navarrete y entonces los medios pulverizan las propuestas colocando matracas y reflectores en la anécdota provocadora . Esto es a lo que se llama cerco informativo , a ocultar el bosque tras los árboles.

El revolucionario no sólo debe poseer arrojo , también debe ser inteligente , y si tiene la generosidad para defender el patrimonio de todos los mexicanos , debe tener también la inteligencia para saberse monitoreado a cada paso por una prensa contraria a los intereses que el revolucionario defiende.

El plan para defender el petroleo es llevar al extremo el plantón Zócalo-Reforma , con lo que se le vuelve a dar armas y munición al enemigo , pues sí un movimiento tan civilizado como la Resistencia Civil Pacífica fue puesto por la prensa como vandalismo , ¿qué se espera cuando el endurecimiento de la resistencia sí pise el area de tal vandalismo? ¡Estrategia, inteligencia! Que no es poca cosa lo que está en juego chingao.