Uno de los pilares de la larga dictablanda priista, Fidel Velázquez, dijo una vez para descalificar los esfuerzos de los partidos de oposición: "A balazos llegamos al poder, a balazos nos sacarán".
El priismo no salió del poder a punta de balazos, sino después de una larga lucha política de muchos sectores de una amplia gama ideológica y poco a poco, con pequeños avances y grandes retrocesos, se ha tratado de construir un régimen de legalidad.
Todavía no termina de cimentarse bien tal régimen de legalidad, pero los numerosos atentados y asesinatos de precandidatos y candidatos a distintos puestos de elección popular parecen indicar que ese incipiente régimen de legalidad está empezando a ser echado a balazos del poder que aun no termina de afianzar.
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